Me paraba todos los dias al atardecer, frente a una hermosa tumba de marmol color rosa jaspeado, que en sus costados se erguian unas columnas torneadas, tambien del mismo material, con unas estatuillas encima, que figuraban unos angelitos, una foto de un hombre trigueno, el nombre de este hombre en letras doradas, dentro de un corazon, con una flecha que lo atravesaba en el centro, de donde pendian unas gotas de sangre, con una dedicatoria que decia..., "siempre estaras en mi corazon"
... aquella tumba me fascinaba, pues habia pertenecido en vida a un doctor famoso, famoso por buen medico, y famoso por haber sido un hombre muy hermoso, que en su epoca, llamaba la atencion de cuantas mujeres conocian de su existencia, este medico no paraba, pues no habia en el pueblo, una sola mujer que no hubiese enfermado de alguna enfermedad rara, que las mantenia en cama por muchos dias, por lo que este doctor se veia obligado a asistirlas diariamente, este medico caminaba por las calles, se le veia agotado, tantas mujeres atendia, que se cree, que se volvio loco y se quito la vida, nadie sabe bien lo sucedido, pero algo sucedio, este medico con solo 36 anos de edad murio joven, su viuda desconsolada, le habia levantado aquella bella tumba a su memoria, tumba que tanto llamaba mi atencion, cogi el habito de visitarla diariamente, de pasarme horas enteras contemplando aquella fotografia, asi me fui habituando a hablarle, no habia un solo dia, que no le dijera que lo amaba, que lo necesitaba, aquellos bellos ojos me miraban desde el angulo donde se encontraba su fotografia, cada vez que veia sus ojos, me hacian extremecer de angustia, me tenian extasiada, embrujada, sonaba con el todas las noches, la noche me parecia inmensamente larga, no aguantaba ya estar fuera de aquel lugar, me dio por dormir encima de ella, la gente pasaba, murmuraba al pasar, miren la pobre loca, dicen que se ha vuelto loca de amor, porque se ha enamorado de un muerto, dicen que habla con el, lo llama, le dice que lo ama, le pide que la lleve con el, no puede vivir sin el, la pobre, tan joven... que malo es volverse loco.
Llevaba yo mucho tiempo pidiendole a mi amor, que se me apareciera, que me hablara, que yo lo amaba, que no le tendria miedo, que el no me tuviera miedo a mi, que ya me era imposible vivir sin verlo, tan loca estaba, que perdia por completo la nocion del tiempo....
Una noche, estaba quedandome dormida encima de la tumba, cuando de pronto oi una voz que me llamaba, amor mio, amor mio, por que estas tan triste..., yo tambien te amo, de tanto escucharte diariamente, haz hecho que te ame, tambien te necesito, pero quiero que abandones ahora mismo mi tumba, que vayas para tu casa a descansar, porque quiero que tambien me dejes descansar a mi, no ves que tu angustia me esta haciendo dano, no ves que con tu llanto no me dejas reposar en paz, ven acercate a mi, asi... mas cerca..., que te dare un beso de despedida, para que te vayas a descansar, me acerque a el y besandome en los labios, me clavo un cuchillo por la espalda...susurrandome bajito, a los muertos no se les puede pertubar, hay que respetarlos, tienes que aprender que a los muertos se les deja descansar en paz...para que aprendas..., ya no lo volveras a hacer mas, ahora sabras lo que significa molestar a un muerto, jajajaja
Autora: Esther Maria Verdecia Batista
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